jueves, 23 de julio de 2009

Libro perdido, encontrado (Parte IV)

La primera carilla tenía nombres masculinos que parecían de procedencia rusa. Estaban escritos en una columna y al lado de cada nombre un sí o un no en mayúscula, afirmando o negando algo, no se que. Talvez eran los nombres que tenía el dueño del cuaderno en mente para su futuro hijo. Claramente no era la primera página del cuaderno, varias debían haber sido arrancadas o perdidas.

Estaban ordenados alfabéticamente, algunos estaban tachados y otros casi ilegibles

Andrei

Hedeon

Markov NO

Mikhail

Petrov NO

Piotr

Stefan

Urie NO

Vladislav NO

Vladmir SI

Yurii

Del otro lado de la hoja había una lista similar pero de nombres femeninos. Era más reducida, en vez de once había tan solo ocho.

Ekaterina SI

Mila SI

Mischa NO

Nadezhda NO

Nina

Sophia SI

Tahsha

Yelena

Mi suposición fue arruinada, no había forma que sea la elección de un nombre para un bebé, a menos que sean mellizos. Sospeché que fuese una lista de alguna clase de evento, en la que se tenían que confirmar los invitados. Talvez de una embajada o algo asi de burocrático y aburrido pero no parecía ser el cuaderno de un canciller, estaba demasiado maltratado, además esa gente no escribe con birome. Hola notebook, hola palm.


Una lista de inmigrantes morosos pensé por un segundo, tenía sentido. Talvez de un sicario. No había ni una sola palabra que me de indicios de que significaba esa lista.


La pava sopló, había puesto agua para un segundo té, no me quedaba más miel, si limón. Preferí tomarlo solo. El libro quedó esperando en la mesa a que vuelva y continúe intentando develar sus poco interesantes misterios. No lo hice.


Fueron varios días después, en el trabajo que me topé con el moleskin nuevamente, abrí una página al azar por la mitad. Las hojas se estaban despegando. Estaba humedecida y teñida de color marrón claro, seguramente café. En uno de los bordes tenía escrita una dirección o eso parecía, la letra estaba borroneada y no llegaba a leerse, en el extremo inferior había otra, Nowy Swiat 42, Varsovia. Esa era toda la información que tenía, me intrigó bastante saber que había en esa calle de Polonia. Decidí anotarla en un cuaderno y comenzar una serie de anotaciones para intentar descifrar aquel libro. Empezaba a tornarse intrigante.

3 comentarios:

  1. me parece genial el blog hasta el momento pero es una lastima que hayas cerrado ganesha, hoy lei tu posteo de despedida y me hubiera gustado ayudar con tu proyecto de expansion, llegue tarde asi que me quedo leyendo tus cuentos, un placer ..

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  2. ohh que pena, pero me alegra saber que hubo gente que disfruto de aquel proyecto tanto como yo hacerlo. Gnaesha fue un proyecto muy zarpado pero no levantó el vuelo que hubiese querido y era yo solo contra el blog actualizando todos los nalditos días.Son etapas que se yo, ahora escribo haha y me alegra que te gusta. un beso

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  3. ey ! firmaste en mi blog hace unos dias en un post viejo y recien me entero..jaja gracias por pasar !

    ahora voy a leer con detenimiento esta saga completa !

    salutes

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